Hace poco he terminado las clases de preparación al parto. Estoy en mi segundo embarazo y no sabía si asistir o no por eso de que ya no eres primeriza y lo has vivido en primera persona, pero como la matrona era nueva pensé que seguro que algo aprendería.
Me sorprendió gratamente la actualización del personal sanitario en estos dos años y medio que han pasado desde que tuve a mi primer hijo. Las clases de lactancia y crianza fueron muy completas y recordé y aprendí muchas cosas. Sin duda, las cosas han mejorado. Sin embargo, la dedicada al parto me dejó el mismo sabor amargo que la vez anterior.