Está claro que cada niño es un mundo, que lo que funciona para uno no funciona para otro, pero hasta que no lo vives en tus carnes no te imaginas cuanto diferentes pueden llegar a ser dos hermanos.
Como ya he contado muchas veces, para mí el BLW es maravilloso y con mi hijo mayor tuve la suerte de poder llevarlo a cabo rigurosamente. Él disfrutaba comiendo y nosotros viéndole como iba avanzando en su alimentación.
Desde que nació la pequeña O estaba deseando que llegara el momento de empezar con la alimentación complementaria y poder seguir el mismo método de alimentación que con su hermano, y yo disfrutarlo aún más ya que contaba con la experiencia y seguridad del hermano mayor.