En casa nos preocupamos por la alimentación, sobre todo por la de M, para nosotros es muy importante inculcarle unos buenos hábitos alimenticios. Pero según van creciendo esto se hace más difícil, ve a otros niños que comen dulces y él también quiere, por lo que una buena forma de evitarlo es cocinar dulces caseros en casa.
Como ya hemos contado otras veces a nuestros pequeños les encanta ayudar en la cocina y si encima es un bizcocho tenemos el cóctel perfecto.
El invierno metidos en casa tarde tras tarde, con un niño de 2 años y una barriga creciente, puede resultar un coctel explosivo.
Si a esto le sumamos la cantidad de azúcar que llevamos encima de estas Navidades (a pesar de no comprar ni un solo dulce navideño mi despensa se llena cada año milagrosamente de bombones, turrones y demás azúcar en formato navideño) una buena opción para pasar la tarde y tener un desayuno “más sano” (no deja de ser un dulce) es este bizcocho de galletas María.
En vacaciones nos gusta aprovechar el tiempo libre al máximo, pero muchas veces se nos acaban las ideas de juego. Uno de los recursos que nosotras utilizamos es involucrarles en las tareas domésticas, y sobre todo en la cocina.
A todos los niños les encanta “cacharrear” en la cocina, y cuanto más les dejemos tocar y mancharse mejor. Por eso hemos aprovechado para estrenar nuestras nuevas tazas para hacer juntos con A y M un Mug Cake.
Cuando te conviertes en madre y tienes niños pequeños alrededor, se hace muy difícil hacer cosas de la vida cotidiana como puede ser ponerte a cocinar. Pero si juntamos eso, con el interés que todos los pequeños tienen por lo que hacen los mayores, se puede hacer una mezcla estupenda. Y con ayuda de la torre de aprendizaje, se hace más fácil involucrarles en esta tarea que a ellos les encanta.
Hace poco fue la fiesta de la guardería de M, y cada familia teníamos que llevar algo para merendar.
